La calma en la productividad
Revisando cómo ha cambiado el tema de la productividad personal en los últimos 10 años, sólo puedo estar contento.
Hace diez años casi nadie hablaba de ser más efectivo, pero en la actualidad casi todas las empresas reconocen la necesidad de tener profesionales que saben auto-organizarse y que son capaces de conseguir más resultados con menos esfuerzo.
Casi todas las grandes organizaciones cuentan con programas de formación en la productividad personal1 y en las universidades se están haciendo muchos estudios científicos para saber cómo podemos rendir mejor.
Ya no tengo que explicar que hay que pensar antes de actuar y el presentismo laboral está casi eliminado de las empresas.
Ya sabemos que trabajar muchas horas o estar muy ocupado no es lo mismo que ser productivo y que si quieres trabajar deprisa, no te queda más remedio que aprender a trabajar despacio.
Si trabajas con la cabeza, hay que tomar tiempo para pensar…
Y por cierto, si estás en camino, te dejo una versión de audio de este artículo del blog, que puedes escuchar y descargar.
Llevo muchos años hablando del concepto Slow Work, aunque creo que debería haberlo llamado ‘Calm Work’, porque lo importante no es la velocidad, sino tu estado mental.
El estado óptimo en la efectividad personal sólo se consigue desde la calma. Si quieres fluir necesitas un bloque grande de tiempo y mucha tranquilidad.
Organizaciones calmas
Lo que en nivel personal ya está aceptado por casi todos los profesionales es una novedad en nivel de las organizaciones.
La gran mayoría de los equipos y empresas no trabajan desde la calma, sino desde el desorden, la comunicación constante,2 las interrupciones innecesarias y la improvisación.
Ultimamente incluso está de moda comparar la situación en las oficinas con una situación extrema de batalla en una guerra y no como indicador de un problema, sino ¡como algo positivo!
Pensando que trabajas en un entorno VUCA es una creencia limitante y muy peligrosa. Es el equivalente de la mentalidad fija para organizaciones, mientras justo en este época necesitamos equipos con una mentalidad de crecimiento.
Mi predicción para este año es que vamos a leer y escuchar sobre estos equipos, empresas y organizaciones que sí trabajan desde la calma, porque ya existen en todos los sectores.
Son organizaciones que optan por el crecimiento lento pero constante, que tienen una visión y objetivos claros, que trabajan en ciclos y que se adaptan ágilmente a los cambios. Son equipos con una cultura de comunicación profunda, donde los miembros están acostumbrados a reflexionar y comparten la visión de la organización.
En los próximos años, la palabra clave en la productividad personal será ‘calma’.
Imagen Calm Work cortesía de Shutterstock
- Hay más trabajo que horas para mi. ↩︎
- Pero superficial. ↩︎