‘Deprisa’ y ‘flexibilidad’, frenos a la efectividad
Yo creo que las organizaciones más productivas son aquellos donde es posible trabajar desde la calma. Desafortunadamente, eso no es lo habitual.
En la mayoría de las organizaciones es normal pasar los días apagando fuegos y gestionando imprevistos, habitualmente fruta de falta de previsión y reflexión.
También en nivel personal existe el riesgo de perder mucho tiempo haciendo cosas que podrían haber sido evitadas, tal como explica José Miguel Bolívar en este artículo.
Cuando se demanda más «flexibilidad» a otras personas, la mayoría de las veces es consecuencia de un trabajo previo insuficiente, o incluso inexistente, de anticipación y previsión.