Aprende a conducir mejor... tu mente

Igual a Alberto Barbero, el tema de las interrupciones es algo que siempre sale en mis cursos presenciales:

Cuando me refiero en un taller a “interrupciones continuas”, por ejemplo, abro la espita a una especie de terapia de grupo en la que todo el mundo quiere participar y cuyo contenido suele girar en torno al uso bélico del mail, a las reuniones que son excesivas y una pérdida de tiempo, a las oficinas abiertas en las que se confunde el trabajo en equipo con la interrupción continua o aquello del “Perdona, es tan solo un minuto”. El día a día de cada persona es así frecuentemente un gráfico de dientes de sierra por donde circula a trompicones nuestra mente y por donde se escapa nuestra productividad. ¿Es posible mantener la dirección ante tanto vaivén?

¿Sabías que la causa de interrupciones más común es nuestra propia mente? De hecho, las ‘interrupciones externas’ no existen, porque sólo tú puedes decidir qué recibe tu atención.

Si realmente quieres reducir el tiempo perdido por causa de las interrupciones, puedes hacer tres cosas:

  1. Pedir a tus compañeros, tus clientes, tus usuarios y tus proveedores que te dejan tranquilo.1
  2. Aplicar el consejo que te dan casi todos los métodos de efectividad personal: capturar la nueva información, idea o tarea para poder volver a la tarea actual lo antes posible.
  3. Mejorar tu capacidad de mantener la atención y el enfoque, por ejemplo aplicando la rutina que describe Alberto Barbero.

  1. No creo que te harán caso, pero lo puedes probar… ↩︎
Jeroen Sangers

Anfitrión del Canasto. Mentor artesano especializado en la Efectividad 2.0 para personas y equipos de trabajo.

https://jeroensangers.com
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