No te inventes la fecha objetiva

Mira un momento en tu lista de tareas. ¿Cuantas tareas ya están pasado la fecha final?

Si tienes tareas vencidas, seguramente es porque no utilizas fechas objetivas.

Un error frecuente es ponderar fechas subjetivas como si fueran objetivas, hecho que suele provocar estrés ya que saturamos nuestro sistema de tareas con fecha, dificultándonos además la elección de la mas adecuada a realizar en cada momento. Por este motivo es muy importante establecer como las únicas tareas que tienen fecha objetiva, aquella en las que nos hemos comprometido con terceros.

Las fechas subjetivas representan un deseo y nunca hay que mezclar los deseos con tus compromisos. Si quieres anotar una fecha subjetiva — la fecha en que deseas finalizar la tarea — hazlo en los comentarios de la tarea.

Este consejo no solo es aplicable a las tareas; hay que aplicar el mismo concepto a los proyectos.

Jeroen Sangers

Anfitrión del Canasto. Mentor artesano especializado en la Efectividad 2.0 para personas y equipos de trabajo.

https://jeroensangers.com
Anterior
Anterior

¿Por qué quieres practicar GTD?

Siguiente
Siguiente

Máxima productividad con Outlook