Cómo saber cuándo algo llama tu atención
Desde hace muchos años explico a mis clientes un flujo de trabajo de tres procesos: Capturar, Clasificar y Completar.
Eso parece una simplificación de los cinco pasos de Getting Things Done, pero no es así, porque cada proceso consiste de dos pasos.
El primer paso siempre es mental y el segundo es físico.
En el proceso de Capturar, primero debes darte cuenta de que algo llama a tu atención (mental) y luego debes registrarlo (físico).
En el proceso de Clasificar, primero debes decidir qué hay que hacer o no hacer (mental) y luego debes registrar esta decisión en tu sistema (físico).
Y finalmente, en el proceso de Completar, primero hay que decidir cuál es la mejor acción a llevar a cabo en este momento (mental) y luego hacerlo (físico).
En este post, José Miguel Bolívar aporta sus ideas sobre lo que para mi será el primer paso (mental) del proceso de Capturar, un tema que no está explicado explícitamente como un paso del flujo de trabajo en Getting Things Done:
[…] saber cuándo algo llama tu atención – aunque no hagas caso – es tan sencillo como aprender a reconocer, identificar y detectar unas pocas situaciones muy concretas y habituales.
Cuando en tu diálogo interior te planteas opciones sobre cosas que podrías, deberías o querrías hacer, eso está llamando tu atención.
Cuando te acuerdas de cosas que necesitas o tienes que hacer, eso también está llamando tu atención.
Cuando tomas una decisión, te comprometes con alguien o alguien se compromete contigo, ese hecho está igualmente llamando tu atención.