Reflexiones sobre la planificación anual

Ahora que estamos en marzo, ¿cómo van los buenos propósitos del año 2014?

A la primera vista, parece que lo normal es hacer una planificación por año natural o por años escolar, pero ¿por qué empezar tu planificación anual en abril?

Como Jordi Fortuny indica, una planificación anual va ligada a la evaluación del año anterior:

el ímpetu de las fechas y las ganas de abrir un nuevo ciclo provocó que dedicara toda la energía a planear el futuro, en abrir nuevos frentes, pero enseguida me di cuenta que no había hecho balance ni crítica suficiente de lo que tenía sobre la mesa a medio hacer, ni había analizado como estaban los buenos propósitos de hace un año, tomé consciencia de lo indispensable de este paso y yo lo estaba olvidando, así que cambié de óptica y llegué a la conclusión que en estas fechas es más importante cerrar, y si conviene, eliminar, que crear nuevos propósitos.

Hacer una reflexión al final de un ciclo es muy importante, pero no excluye poder hacer después una nueva planificación. Son dos cosas muy distintas.

Jeroen Sangers

Anfitrión del Canasto. Mentor artesano especializado en la Efectividad 2.0 para personas y equipos de trabajo.

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