5 ideas clave detrás de GTD
Hoy en día, Getting Things Done es uno de los métodos de productividad más populares. Su autor, David Allen, ha diseñado el método basándose en sus experiencias con cientos de directivos de grandes empresas. En este artículo quiero compartir cinco de sus observaciones, que forman la base de GTD.
- La productividad personal consiste en dos ‘pilares’: obtener el control sobre tu trabajo de cada día (gestionando correo, tareas, llamadas, etc.) y mantener perspectiva fijando objetivos. La mayoría de las personas necesitan ayuda para gestionar las cosas de cada día, pero no tanto con la parte de los objetivos. Es decir que saben—más o menos—lo que quieren, pero no cómo conseguirlo.
- Es más fácil organizarte que recordar cosas. El cerebro no está hecho para gestionar tareas.
- Las listas de tareas no funcionan para la mayoría de las personas, porque no apuntan acciones que realmente puedes hacer. Lo que apuntan son proyectos, elementos que requieren varias acciones para completar. Una acción es una sola tarea física, sin dependencias, que pueden completar.
- Por media, las personas tienen 200 acciones pendientes. No se puede gestionar 200 acciones, pero sólo una parte de estas tareas está disponible en el contexto actual. No puedes hacer compras cuando estás en la oficina, ni hablar con tu compañero cuando estás en casa. Si divides las acciones por contexto, puedes reducir el número de opciones disponibles entre 20 y30.
- No debes usar la bandeja de entrada como lista de tareas; organiza el correo en carpetas. Tener 1000 mensajes en la bandeja de entrada, de los cuales sólo 20 son importantes, no funciona. Organiza los mensajes por acción y mantén el inbox vacío.
Este artículo ha sido publicado originalmente en Un CIO como tú en una Cloud como ésta...