¿Tienes una lista completa de tus proyectos?
Uno de los elementos clave del método Getting Things Done es la lista de proyectos. En la definición de David Allen, un proyecto es cualquier resultado que requiere varias acciones para completar. Hay proyectos sencillos con solo dos pasos, como, por ejemplo, comprar y cambiar una bombilla de una lámpara y proyectos grandes y complejos con cientos de tareas y varios colaboradores, como, por ejemplo, una reestructuración de una empresa.
Estos dos tipos de proyectos tienen en común que al finalizar una tarea hay que pensar cuál es la próxima tarea del proyecto. Recuerda que en la lista de acciones sólo trabajamos con las próximas acciones—las tareas que no tienen ninguna dependencia de otras tareas. Cuando finalizamos una acción de un proyecto, tenemos que añadir la acción siguiente a nuestra lista de acciones para asegurar el progreso.
La lista de proyectos usamos durante la revisión semanal para verificar el progreso y las acciones disponibles.