Frente a Procrastinación, 120 minutos de acción
Berto Pena explica un método interesante para finalizar las tareas residentes:
Esta técnica o ejercicio (más bien forma de proceder) consiste en reservar dos horas del viernes, 120 minutos, dedicados íntegramente para terminar las tareas que una y otra vez retrasas. Esas tareas o actividades que todos conocemos en nuestros trabajos y que son carne de procrastinación: para las que nunca encuentras un momento, que al final siempre dejas para mañana («seguro que mañana lo hago»), que rehúyes instintivamente, o de las que directamente sales corriendo porque te desagradan.
Nunca he probado esta técnica, pero estoy convencido que funciona muy bien si tienes la disciplina para convertir esta técnica en un hábito.